Hace alrededor de un año adquirí una prueba genética para rastrear las diferentes razas que existen en mi. Por el hecho de ser puertorriqueña, uno ya esta consiente que debe haber una mezcla de razas. El Taino, el Español y el Negro es una combinación que nos hacia un país interesante ante los ojos de los curiosos y de aquellos que están fascinado como la manifestación de ciencia.
Se me olvidaba tomar la muestra de la saliva cada día. Mi estrategia tardo en funcionar: tomar la muestra una vez me levantara. Días se volvieron semanas. Semanas se volvieron en meses hasta que el pasado Diciembre 2017 me acorde de hacer la prueba una mañana. Todo fue en orden ese día.
Luego de recibir los resultados seis semanas después, comencé a prepara el árbol genealógico. Esta vez usando Ancestry.com. Ya tenia alguna información de mis bisabuelos ya que me crie con mis abuelos paternos pero no mucha información por la parte de mi madre biológica.
Al crear el árbol genealógico en Ancestry.com con la información exacta de los miembros de la familia, se recibe unas “pistas” de la persona que se esta listando. Estas pistas pueden ser (en mi caso) información de los censos, actas de defunción, registros de matrimonios etc. Puede ser que ya algún familiar cercano o lejano haya incluido miembros en su árbol.
En esta nueva aventura de ir tan atrás cuanto pueda en mi árbol (hasta ahora he llegado a 1835) me tope con una pista de mi papa.
Mi padre murió en 1971. Apenas sabia una que otra palabra. Lo que conozco de mi papa son una pocas fotos y las opiniones y anécdotas de miembros de mi familia. Entre estas, era que el fue hijo favorito de mi abuela. El que tenia el mejor cuerpo, el mas guapo, el de buen vestir, el tranquilo, el zurdo, el vicepresidente de los “Scorpions”.
Todavía a esta edad me es difícil visualizar mi padre como un miembro de una ganga en New York, especialmente con todos los elogios que escucho sobre el. Pero quizás es fácil reconocer los atributos de las personas cuando no están con nosotros y en su caso, no vivió mucho para dejar mas recuerdos.
En esta travesía, descubrí que alguien había preparado el árbol genealógico de mi familia por parte de padre incluyendo una “foto” de el. Esto me pareció interesante. No hay muchas fotos de mi padre.
Esta persona que incluyo su foto, conoció a mi padre pero el nombre de la misma no era reconocido en mi memoria. Pensé en un principio que era un pariente de parte de los hermanos o hermanas de mis abuelas pero no pude rastrear su apellido a miembros de la familia lejana.
Di mil vueltas en mi cabeza hasta que decidí contactar esta persona vía Ancestry.com.
Mi primera comunicación fue algo directa y aprecio la gentileza de su pronta respuesta; “Conoció a mi padre?” Y luego le indique que la foto que aparece no se parece a los fotos que tengo de el. También aclare que la única tía que me queda esta viva y no pereció en el 2014 como indicaba la información que había incluido.
Para mi sorpresa ella contesto rápido. Era obvio que dudaba que alguien mas preguntara por la misma persona que conoció hace 58 anos atrás. Era personal. Era el pasado que de cierta manera se asomo a su presente.
Contesto con duda. Me indico que conoció mi padre en 1960 cuando ella tenia quince años. Se refirió a el por un apodo usado en el área que vivían, “Lefty” porque era zurdo. En la familia su apodo era “Ito” porque era el pequeño hasta que mi tío menor nació. Apodo dado por mi tía Elena que era mayor que el. Estos dos hermanos se adoraban. Con los años aprendí a conocer el cariño que mi tía le tenia a padre.
Estaba curiosa de saber como esta señora conocía a mi familia. Cuan amiga podía ser de mi padre o de mis abuelos. Si fueron compañeros de clase. Cuan cercana seria? Su nombre nunca se menciono en mi casa. Su apellido tampoco era familiar.
Una mezcla de asombro y compasión me cubrió como un mosquitero cuando recibí. su segunda correspondencia. Podía ver lo que ella vivió con un matiz borroso por los años pero su experiencia no me podía tocar. Al menos como la toco a ella.
Resulta que ellos salieron en ese tiempo y me indico que siempre lo ha recordado con mucho cariño. Perdió contacto con el cuando la relación termino. Me dijo el nombre de mis abuelos. Sabia que mi padre había fallecido joven pero no sabia que había tenido hijos. Le respondí que era la misma persona y que yo era su hija. En ese momento, su tono cambio.
Su comunicación reflejaba cierta melancolía y emoción. En ella me indico que le tuvo un gran cariño ya que en ese tiempo el la protegía mucho en especial porque el área no era de lo mejor.
Me dijo, que mas que todo eso, lo consideraba su primer gran amor. Que fue una pena que no lo pude conocer. Y en la brevedad de esta ultima nota se despidió con la frase “de alguien que pudo haber sido tu madre”.
Es extraño conocer a una novia del padre que no conocí pero fue fascinante saber que habían otras personas aparte de la familia que lo recordaban.
Muchas veces pensamos en nuestra historias de amor y quizás la de nuestros padres. Me imagino que es una fascinación que nos cuenten de relaciones anteriores como producto de nuestra curiosidad. En mi caso, conocí a la antigua novia de padre por cosas del destino. Quizás para cerrar un capitulo, quizás para abrir otro. Quizás para encontrar una respuesta o generar mas preguntas. El tiempo lo dirá. Pero creo que estas son mas para ellas que para mi. Hay amores y hay amores. Unos que terminan con cariño y que se transforman en un lindo recuerdo, otros con pasión, otras con decepción, los que no terminan y todas las demás variantes. Sin embargo la muerte transforma algunas cosas. Luego de la misma, lo que queda de ese amor romántico, solo queda dentro de uno solo y no de dos. Ya no es una historia compartida, ya es solo el recuerdo de uno y no de dos. Al final ese amor que ella tuvo, lo pudo contar ella, porque el ya no esta. Y esa fue su historia, que pudo compartir con la hija de su primer gran amor gracias a Ancestry.com
DRV
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